Canarias Metal Zone

Hace un año fui a la primera edición del Canarias Metal Zone (CMZ), un festival de Heavy Metal que se celebra aquí en Gran Canaria. Tuvo bastantes fallos de organización, pero me lo pasé increíblemente bien. Me quedé segundo en el concurso de dibujo (Ganándome una camiseta del festival) con este dibujo y mi novia se quedó tercera (No hubo tongo, os lo juro…). En honor a la verdad, he de decir que el dibujo lo coloreó por photoshop Deivid y ganó tres enteros, pero le compré un par de cómics en agradecimiento :) Con ese festival descubrí a Warcry, Saratoga, Freak Kitchen y muchos buenos grupos más. Incluso conseguí autógrafos de Warcry y de un tío que no sé quien es XD. El problema fue que el primer día de festival hubo fallos de sonido y no se oían bien a los grupos, además tuvo 3 horas de retraso (Sumados a la hora y media del primer día) y diversos problemas así. Además, os guardias de seguridad eran extras del Donkey Kong y se liaban a hostias con todo el que podían… Una mierda de organización, vaya. Pero el concierto moló.

Cuando me enteré que se preparaba la segunda edición, lo recibí con escepticismo. No sabía que pensar de la organización, y los grupos que tocaban o no los conocía (Rage, Kreator, Evergrey) o no me llamaban la atención (Stravagganza, Witche’s Sabbath, etc…). Un amigo me intentó convencer de que fuera, porque cuanta más gente vaya, más oportunidades hay de que se hagan más iniciativas como ésta, blablabla. Yo le dije que esa fue la razón de que fuera al primer CMZ, y que hasta que me demostraran que se organizaban bien las cosas, yo no iba a ir a ver grupos que no conocía. Así que este fin de semana se celebró el festival y yo no fui.

Ahora voy a hacer una reconstrucción más o menos real, gracias a fuentes diversas, de lo que pasó el viernes por la noche (Primera noche del festival).

Fuera del concierto había varias personas bebiendo usando el coche como mini-bar y Fran Rivas, el organizador, les dijo que la policía había amenazado con cerrar el concierto porque había quejas por el “botellón”. La mayoría de la gente (Según una de mis fuentes sólo había una persona, y ésta entró) entró y siguió el concierto como si nada. Cuando le tocaba actuar al último grupo, lo hizo desganado y sólo estuvo en el escenario 50 minutos de los 120 que debían tocar. Al término del concierto, Fran Rivas subió al autobús que habían alquilado para decir que (Atención, que esto es fuerte) el concierto del sábado se cancelaba. Estuvo diez minutos diciendo que la culpa era de la gente que hacía botellón fuera, y que como había ido poca gente al festival (También culpando al absentismo) el gobierno de Canarias les había quitado la licencia para actuar el sábado. Mal rollo, cabezas bajas y cabreos…

Al día siguiente, Fran Rivas ha desaparecido con el dinero recaudado, sin pagar a los grupos, sin pagar a los trabajadores y sin devolver el dinero de las entradas del sábado. Se descubre que el Gobierno de Canarias apoyaba al 100% el concierto (Incluso salió un represante a dar la cara, aunque no tenía porqué hacerlo) y de problemas de licencia nada de nada. Los grupos del viernes tocaron sin cobrar un puto duro (Es más, PAGANDO el coste del traslado a Gran Canaria), y los del sábado no hicieron nada de nada.

Ahora Fran Rivas se ha declarado insolvente y tiene sobre su cabeza más de 700 denuncias. Todos los jevis de Canarias están cabreados y (Según me han contado), le han embargado el piso a la novia y la madre del organizador… Por lo visto Fran Rivas pretendía utilizar el dinero recaudado el viernes (Cuando él sabía que no había vendido ni 400 entradas, de las 2000 que preveían) para pagar a los grupos, y que al verse sin perras, salió por patas.

Y yo, que fui previsor, tengo mi cartera intacta… Vicente, te lo dije. Pero los perjudicados no son sólo los que pagaron la entrada del sábado. Somos todos los que nos gusta esa música y que ahora tendremos que esperar a saber cuánto para que se organice un evento similar en las Islas Canarias...

Grande Cagada. Si las llamas del logo del CMZ tenían algo de premonitorio... ya lo sabía yo.